
Cuando se trata de elaborar presupuestos para grandes clientes con inversiones muy significativas, el enfoque debe ser meticuloso, estratégico y alineado con los objetivos del cliente. Este proceso no es solo una tarea administrativa; es la base para construir una relación profesional sólida y establecer expectativas claras.
El primer paso es identificar los canales de Paid Media que se van a utilizar. Cada canal tiene características únicas y desempeña un papel distinto dentro de una estrategia integral. Por ejemplo, Google Ads puede ser ideal para captar demanda existente, mientras que Meta Ads puede funcionar mejor para generar demanda y construir audiencias. Este análisis inicial no solo define el alcance del presupuesto, sino que también demuestra un conocimiento profundo de las herramientas disponibles.
Calcular el presupuesto es más que una cuestión de matemáticas. Es necesario basarse en datos históricos, benchmarks del sector y objetivos claros. Una inversión muy elevada exige justificaciones fundamentadas que incluyan expectativas de retorno y análisis de riesgos. Por ejemplo, si el cliente planea gastar más de 100.000 € al mes, un desglose detallado de los costes por canal y tipo de campaña, así como un plan de optimización, es fundamental.
Definir la estrategia general es un aspecto clave. Este paso implica estructurar un enfoque claro que el cliente pueda entender y visualizar. Un cliente de alta inversión busca transparencia y claridad, y es vital mostrar cómo cada componente del presupuesto contribuye al éxito de la campaña. Esto podría incluir desde la distribución entre upper y lower funnel hasta la frecuencia esperada de actualización de los creativos.
La estructura de las campañas debe ser detallada pero flexible, incluyendo la inversión asignada a cada canal y los formatos de anuncio seleccionados. Adicionalmente, conviene explicar conceptos que puedan no ser familiares para el cliente, como la importancia de los primeros 3 segundos de un video o cómo funcionan las audiencias lookalike.
Otro elemento crucial para los presupuestos muy altos es calcular el tiempo necesario para la gestión. Gestionar proyectos de alta inversión requiere una supervisión más constante, por lo que incluir las horas estimadas y la necesidad de un equipo adicional, como por ejemplo para la creación de diseños, es una señal de profesionalidad. Si la escala del presupuesto lo requiere, tener un segundo gestor dedicado al proyecto asegura que todos los aspectos sean monitorizados adecuadamente.
Por último, todo debe plasmarse en un documento de calidad. Este documento actúa como referencia y fortalece la percepción profesional. Presentar el presupuesto en un formato organizado, claro y visualmente atractivo marca la diferencia a la hora de transmitir confianza.
Crear presupuestos para clientes muy grandes es un ejercicio de estrategia, comunicación y previsión. Es la oportunidad de establecer cimientos para proyectos exitosos y relaciones duraderas en el tiempo.